La primera vez que se celebró el Día Internacional de las Niñas en las TIC fue el 21 de abril de 2011. Esta conmemoración, recordada el cuarto jueves de abril de cada año por acuerdo de los Estados miembros de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), en su Resolución 70 de 2010, tiene como objetivo crear un entorno favorable para fomentar la participación de niñas y mujeres en carreras de este sector.
Estudios y resoluciones internacionales de Naciones Unidas y de la Comisión Europea sobre la brecha de género alertan sobre la importancia de que las niñas y las mujeres no solo sean consumidoras de tecnología, sino también creadoras de las mismas.
Las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) impulsan el crecimiento y la innovación en el mundo entero e influyen en todos los ámbitos de la vida, y convierten a las niñas y mujeres jóvenes en usuarias y creadoras potenciales de aplicaciones para el desarrollo de nuevas TIC.
Es por ello que reafirmamos la necesidad de alentar y capacitar a las niñas y mujeres jóvenes a desempeñar y protagonizar roles académicos y profesionales vinculados al campo de las TIC. En este sentido, se apunta a reducir la brecha digital por cuestión de género que hoy existe en estos espacios.
En el mundo actual, las TIC adquieren un papel preponderante en la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres, ya que ofrecen nuevos modos de aprender, compartir conocimientos y educarse, a la vez que son una fuerza multiplicadora en lo relativo a la educación de las niñas, porque les permiten construir su futuro en ámbitos comúnmente liderados por los varones.
Estas tecnologías aportan los medios necesarios para lograr el desarrollo económico al ofrecer nuevas oportunidades de ganarse la vida y nuevas capacidades de producción. Proporcionan una serie de beneficios gracias a un mejor acceso a los servicios y permiten a las mujeres movilizarse para defender sus derechos y convertirse en emprendedoras sociales activas.
Así pues, hoy celebramos la necesidad de fomentar y crear un entorno que empodere a niñas y mujeres jóvenes y las anime a contemplar una vida profesional en el campo creciente de las TIC.